Retrato de un kamikaze feliz
Un retrato de Luis Manuel Otero Alcántara es imposible excepto, quizás, para él mismo. Fácil sería pintar su pelo afro, la boca grande, las extremidades largas y su estilo fashion, desenfadado, que acepta lo mismo un traje con lentejuelas que una flor adornando su cabeza o unas uñas pintadas de rosado chillón.