Los nuevos productos culturales del castrismo se impusieron instantáneamente en el mercado de ideas. La gente compró bonos, compró el concepto de lo revolucionario, la fantasía del cambio y la esperanza
¿Quién dijo “No digas gay” en Miami?
Aquellos que buscaban salida por el puerto del Mariel enfrentaban un tribunal de certificación en el que se les obligaba a acusarse de escorias y homosexuales
Maykel Osorbo: Un fuego doblando la esquina
La primera vez que vi a Maykel Osorbo fue un 11 de febrero, cuando todavía no había salido el tema de Patria y Vida. Un montón de amigos lo conocían y no paraban de hablar de él, que si Maykel esto, que si Maykel lo otro.
De Barbies y Barbudos
Dos años antes de que apareciera Barbie, la Revolución castrista fue empaquetada y exhibida como una muñequita en la Feria de Juguetes de New York City por el vendedor extraordinario Herbert Matthews.
Fito Páez en la Filmoteca de Cuba
“Revolución es lucidez”, dijo Alfredo Guevara al ensayista Abel Sierra Madero en 2014. Pero Juan Pin demuestra que la Revolución es más bien idiotez, que se nutre de veleidades y bajas pasiones, de vanagloria y ambición desmedidas.
Cuba: Más de 60 años de sorpresas
En 2007, Raúl Castro se paró delante de todo el pueblo a criticar que los cubanos solamente recibieran leche hasta los siete años y aseguró que eso iba a cambiar. “¡Hay que borrarse de la mente eso de los siete años! ¡Hay que producir leche para que se la tome todo el que quiera tomarse un vaso de leche!”, dijo el Castro menor.