Ilustración: Julio Llópiz-Casal
El gobierno cubano, a través de la empresa estatal ETECSA, ha vuelto a ejercer mecanismos de censura en medio de momentos de tensión política, violando así los derechos digitales y la libertad de expresión de sus ciudadanos. En esta ocasión, el régimen ha echado mano a uno de sus métodos censores más usados: el bloqueo de palabras claves para los servicios de mensajería SMS.
A una larga lista de palabras, términos y frases bloqueadas se suman ahora 15N, abajo y marcha. Esto sucede a menos de un mes de la fecha determinada (15 de noviembre) por la plataforma de activismo político Archipiélago para la realización de una protesta pacífica que exigirá cambios democráticos en la Isla.
— Ciudadano del Cielo (@JuanCar54596781) October 14, 2021
Bloqueos anteriores
En 2016 se reveló que ETECSA, el monopolio estatal de las telecomunicaciones en Cuba, impedía que llegasen a sus destinos SMS que contuvieran ciertas palabras claves, aun cuando estas fueran utilizadas en contextos no políticos o no contrarios a los intereses del gobierno.
Ese año, el diario independiente 14yMedio publicó una lista con dichas palabras, entre las que se encontraban democracia, dictadura, y nombres de activistas y periodistas como José Daniel Ferrer y Yoani Sánchez.
Tres años después se divulgaron otras palabras y frases que se sumaban a la lista de términos censurados. Por entonces el gobierno bloqueó el envío de mensajes que contuvieran Voto No y No Voto. Esto sucedió durante los meses previos a la aprobación de la actual Constitución de la República de Cuba, donde el régimen desarrolló una campaña por el voto afirmativo que se caracterizó por la censura sobre expresiones que abogaran por el abstencionismo o por el voto negativo.
Tras las protestas populares del pasado 11 de julio, ETECSA bloqueó al menos cinco palabras más para el servicio de mensajería SMS: VPN, protesta, comunismo, SOSCuba y libertad. El bloqueo de SOSCuba se debió a que este fue el hashtag más difundido en Cuba en redes sociales antes, durante y después de las protestas. En el caso de VPN, la razón detrás de la censura está en el hecho de que estos software fueron muy utilizados en la Isla una vez el gobierno bloqueó el acceso a redes sociales y plataformas de mensajería online, para que la sociedad civil no se organizara ni se divulgaran imágenes de la represión ejercida por las fuerzas policiales y militares contra los manifestantes.
Hice está misma prueba y el resultado es muy interesante. Todos los sms q envié solamente los que tenían las palabras VPN o comunismo no me llegaron nunca, pero sin embargo las palabras EEUU o CIA no están bloqueadas, no era q éramos pagados por la CIA? 🤷♂️@norges14 https://t.co/p1ZZOZP0uc pic.twitter.com/TjUDCwoF3D
— Rafa 🆘🇨🇺 (@rafrsr) July 14, 2021
En agosto de 2021 el proyecto Inventario notificó que la lista de palabras censuradas continuaba en aumento, esta vez con expresiones como Díaz Canel Singao, conexión, expresión, Cuba Muere, 11J y Patria y Vida.
Actualizamos nuestra lista de palabras censuradas en los SMS de ETECSA. Si pruebas alguna otra que nos falte, avísanos y comparte una captura de pantalla para registrarla en la lista. https://t.co/RoIMCnlbVX pic.twitter.com/GqxA2xhy2b
— invntario (@invntario) August 21, 2021
A pesar de ser bloqueados los mensajes con los términos ya citados, ETECSA cobra los envíos como si estos hubiesen llegado a sus destinatarios.
Bloqueo de palabras claves en otros países
El régimen cubano no es el único que bloquea las comunicaciones mediante el filtrado de palabras claves. De hecho, es una práctica muy usada por gobiernos no democráticos o parcialmente democráticos. En ocasiones estos filtrados suceden en países conservadores, como Pakistán, donde en 2011 el gobierno ordenó bloquear los SMS que contuvieran “palabras obscenas”, sin embargo, las causas principales de estas acciones en el resto del mundo suelen ser políticas.
Uno de los países donde más se aplica este método de censura es China. En 2004, por ejemplo, el gobierno obligó a las empresas de telecomunicaciones a bloquear los SMS que contuvieran palabras y expresiones claves. El sistema de filtrado de estas palabras, además, está pensado para alertar inmediatamente a la policía o archivar los “mensajes sospechosos”, según un reporte de El País.
El sistema de filtrado también se aplica en otros tipos de comunicaciones, incluyendo redes sociales, llamadas telefónicas y publicidad en línea. Así lo informó Share América, una plataforma del Departamento de Estado de Estados Unidos que monitorea las amenazas a la democracia y la libertad de expresión en el mundo. Según este informe, el gobierno chino ejerce censura sobre palabras y expresiones como Winnie the Pooh (figura que se usa en ese país para refererirse despectivamente al líder del Partido Comunista de China, XiJinping), Dalai Lama (personalidad que simboliza la independencia tibetana), Liu Xiaobo (activista de derechos humanos chino galardonado con el premio Nobel de la Paz), dictadura y Gran Muralla de China (expresión utilizada también para referirse a la censura en internet en esa nación asiática).
In mainland China, any discussion of the anniversary of the Tiananmen massacre is quickly scrubbed by censors, while the authorities harass relatives of those killed and block any formal memorials https://t.co/9gMVGqXjy6
— New York Times World (@nytimesworld) June 4, 2020
China's 800+ million internet users are some of the most social media–savvy and active in the world, but the Chinese government’s oppressive internet censorship means everything they see is restricted & controlled. https://t.co/dzOgSYysTM
— ShareAmerica 🇺🇸 (@ShareAmerica) June 4, 2020
La censura china también ha llegado al universo lúdico online. El videojuego Genshin Impact, uno de los más populares en ese país, cuya empresa también tiene sede en China, posee un chat que permite la comunicación entre jugadores. En dicho chat el régimen también aplicó el filtrado de palabras referidas a los conflictos en Hong Kong, Taiwán y el Tíbet. Los términos censurados, en vez de no enviarse, le aparecen al destinatario con asteriscos en vez de letras.
Ya en 2019, el tema de la censura en China llegó a la sede del Senado estadounidense, cuando esta institución llamó a una audiencia pública a Karan Bathia, el vicepresidente de políticas públicas de Google. El motivo fue la confirmación del proyecto Dragonfly, un motor de búsqueda en internet con censura integrada, hecho por Google para el mercado del gigante asiático. Bathia se comprometió entonces a cerrar Dragonfly, el cual buscaba filtrar sitios webs en China mediante el filtrado de palabras prohibidas que refirieran a derechos humanos, democracia, protesta pacífica y a los sucesos de la Plaza de Tiananmen.
Siria es otro país donde el gobierno usa el filtrado de palabras claves para limitar el acceso a comunicaciones y a la información de sus ciudadanos. Un reporte de MIT Technology Review dio cuenta en 2014 que el gobierno sirio censuraba contenido en internet a partir de la interceptación de palabras y expresiones que aludieran a cuestiones políticas contrarias a los intereses del gobierno, tales como Israel y Revolución siria. Algo similar ocurre en Irán, al menos desde 2012. Aunque en este caso, como en Cuba, la lista de expresiones filtradas para ejercer la censura suele aumentar en fechas significativas para el régimen iraní, como la celebración anual del triunfo de la Revolución islámica.
En la Venezuela chavista, las palabras y frases censuradas son de dominio público de medios como la radio y la televisión. Según un reportaje de Medianálisis, la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) venezolana da a sus medios un listado de expresiones y palabras que no pueden ser reproducidas a la población. También los SMS son censurados en este país, incluyendo aquellos que contengan nombres de líderes opositores al régimen de Nicolás Maduro.
En el caso de Vietnam, de sistema unipartidista donde rige el Partido Comunista, existe un código elaborado por el Ministerio de Información y Comunicación de ese país que prohíbe el uso de una serie de “palabras malsonantes” a los usuarios vietnamitas en redes sociales. Aunque dicho código no especifica sanciones sobre los infractores, contiene otros asuntos igual de preocupantes para la comunidad internacional, ya que obliga a empresas como Facebook a eliminar contenido que “afecte a los intereses del Estado”.