El gobierno cubano quiere imponer una nueva narrativa evasiva respecto a la situación del internet en la Isla durante las últimas semanas. Esta narrativa se intenta divulgar mediante denuncias de supuestos ataques desde redes sociales que ignoran las constantes violaciones de derechos digitales en la isla, generalizadas desde el pasado 11 de julio.
El pasado 26 de julio, el diario oficial Granma informó que la ministra de Comunicaciones, Mayra Arevich Marín, envió una carta al secretario general de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), en la que denunciaba presuntas incitaciones a “actividades delictivas y terroristas” en plataformas de internet desde Estados Unidos.
En la carta, la ministra dijo que en redes sociales se ha promovido “discursos de odio, incitación a la violencia, la subversión, la difusión de noticias falsas y la tergiversación de la realidad con fines políticos como pretexto para el desencadenamiento de una guerra o una intervención militar”. De todo esto culpó a la administración Biden y a empresas como Facebook, Twitter y Youtube.
Mayra Arevich, sin embargo, obvió en la misiva que ella misma, aún con el cargo de presidenta ejecutiva de ETECSA, único proveedor de internet en Cuba, violó los propios estatutos de Twitter al llevar durante cinco años un perfil donde ocultaba su identidad para acosar virtualmente a periodistas independientes y políticos cubanoamericanos.
Cronología de una mentira
La carta de Arevich omite los cortes de internet y la censura sobre redes sociales y servicios de mensajería aplicados por el régimen durante las protestas del 11 de julio y las siguientes semanas. No se trata de una evasión aislada, pues otros funcionarios han intentado hacer lo mismo, a veces contradiciéndose unos a otros.
En horas de la tarde del 11 de julio, el gobierno cortó el acceso a internet en todo el país mientras reprimía violentamente las protestas pacíficas que se desarrollaban en decenas de localidades. Las evidencias sobre este corte sobran. Empresas de monitoreo en la web, observatorios de internet y ONGs como Kentic.inc, Netblocks, OONI y Access Now ofrecieron pruebas irrefutables sobre esto, y también sobre el bloqueo a redes sociales y plataformas de mensajería online aplicado después.
Disrupting the internet means silencing people who are protesting in Cuba. #KeepItOn #SOSCuba #PatriaYVida https://t.co/ze9N2zKVJl
— Access Now (@accessnow) July 12, 2021
Confirmed: Social media and messaging platforms restricted in #Cuba from Monday on state-run internet provider ETECSA; real-time network data corroborate reports of internet disruptions amid widening anti-government protests; incident ongoing 📵#CubaSOS
📰https://t.co/7eGwPS1Mqf pic.twitter.com/kY3G1qMAse
— NetBlocks (@netblocks) July 12, 2021
En una conferencia de prensa desarrollada el 13 de julio, el ministro de Relaciones Exteriores cubano, Bruno Rodríguez Parrilla, pretendió achacar los cortes y la censura de internet a “problemas con el fluido eléctrico”. Ese mismo día, una vocera del gobierno contradijo a Rodríguez al afirmar que el bloqueo a servicios de internet respondía a una “medida soberana” hecha para cortar el acceso a redes sociales, ya que estas son “un área donde se está organizando una guerra contra Cuba”. Poco después, el proyecto Inventario publicó la declaración de una trabajadora de ETECSA, quien confesó que restringir internet era “una decisión tomada para la máxima dirección del país”.
Empleada de @ETECSA_Cuba le informa a un cliente el lunes 12 de julio que la falta de internet es una interrupción a nivel nacional, una decisión tomada por la máxima dirección del país. pic.twitter.com/UvCLL9lOYp
— invntario (@invntario) July 16, 2021
Desde entonces, la nueva narrativa que pretende posicionar el gobierno cubano para esconder su responsabilidad en la violación de los derechos digitales en la isla no ha hecho más que repetirse.
La pasada semana, Carlos Fernández de Cossío, director general para Estados Unidos del Ministerio de Relaciones Exteriores (MINREX), ofreció una entrevista a la cadena de noticias estadounidense MSNBC. Ante una pregunta relacionada con los cortes de internet que sucedieron durante y después de las protestas, respondió:
“El acceso a internet no está interrumpido ni ha sido interrumpido en Cuba. Algunos servicios de internet han tenido que ser esporádicamente interrumpidos, pero el verdadero tema aquí es el ataque a través de internet contra Cuba, con la participación del gobierno de Estados Unidos.”
No obstante, la periodista de MSNBC, Andrea Mitchell, insistió en esta cuestión.
“Repito, fue una esporádica interrupción de algunos servicios de internet. En Cuba no cortamos el internet. La gran historia aquí es que se atacó a Cuba desde internet con la participación del gobierno de Estados Unidos y de compañías estadounidenses de internet”, repitió Fernández de Cossío.
El 23 de julio de 2021 la periodista @mitchellreports preguntó a @CarlosFdeCossio sobre los cortes de internet durante las protestas del #11JCuba. Esta fue la respuesta del funcionario del @CubaMINREX: pic.twitter.com/GnSirloyaP
— YucaByte (@YucaByte) July 29, 2021
Como demostración adicional de que el régimen ha establecido un discurso esquivo sobre sus violaciones de derechos digitales está la entrevista que ofreciera Johana Tablada, subdirectora general para Estados Unidos del MINREX, a CNN en español. Ante la pregunta sobre los cortes de internet, Tablada se limitó a reproducir el discurso de su superior inmediato, aunque sí reconoció las interrupciones de internet.
“Es verdad que hubo días en que hubo interrupciones de internet, pero aquí la noticia más grande es que contra Cuba se está haciendo un golpe blando”, declaró.
#KeepitOn #SOSCuba
El 21 de julio de 2021 el periodista @jclopezcnn le preguntó a @JohanaTablada sobre los cortes de Internet durante las protestas del #11JCuba y esta fue la respuesta de la funcionaria del @CubaMINREX: pic.twitter.com/l3kqNguQPk— YucaByte (@YucaByte) July 29, 2021